Animación
En 1824, Peter Mark Roget descubrió (o redescubrió, ya que el concepto era conocido en los
tiempos clásicos) el principio vital de la "Persistencia de la Visión". Este principio está basado en el
hecho de que nuestros ojos retienen temporalmente la imagen de cualquier cosa que se haya
acabado de ver. Si no fuera asÃ, nunca podrÃamos tener la ilusión de conexión que se realiza en
una serie de imágenes separadas y ni las pelÃculas ni la animación serÃan posibles. Mucha gente
no se da cuenta que en realidad las pelÃculas no se mueven, y que se trata de una serie de
imágenes estáticas que parecen moverse cuando son proyectadas en serie.
El Taumátropo: Un disco de cartón con los extremos atados a un par de cuerdas. Una jaula
dibujada en un lado y un pájaro en el otro. Cuando los extremos de las cuerdas son jalados, el
disco gira, las imágenes se mezclan y el pájaro parece como si estuviera en la jaula.
El Fenaquitoscopio: Dos discos montados sobre un vástago, el disco que está al frente tiene
ranuras en el borde y el disco en la parte posterior tiene una secuencia de dibujos. Alinee las
ranuras con los dibujos y mire a través de las aberturas, haga girar los discos y obtendrá la
ilusión de movimiento.
El Zootropo (o rueda de la vida): Apareció en Norteamérica en 1867 y se vendió como un juguete.
Largas tiras de papel con una secuencia de dibujos en ellas, se insertaban dentro de un cilindro
con ranuras. Se giraba el cilindro, se miraba a través de las ranuras y los dibujos parecÃan
moverse.
El Praxinoscopio: Inventado por el francés Emile Reynaud en 1877. El fue el primero en crear
secuencias cortas de acción dramática dibujando en una tira de 30 pies de longitud de una
sustancia llamada "Cristaloide". Esto abrió el camino a los tremendos avances que vendrÃan.
El Flipper book o Flip book: En 1868 apareció a nivel mundial un novedoso invento llamado el
"Flipper Book" que hasta ahora se mantiene como el más simple y popular de estos inventos. Es
simplemente una libreta con dibujos en secuencia. Se sostiene con una mano y con la otra se
"abanican" o "flipean" las páginas, y los dibujos en ellas parecen moverse. El resultado es
animación, la ilusión de acción continua. Dibujos en el tiempo.
Hoy en dÃa, el animador clásico aún "flipea" o "abanica" sus dibujos de la misma manera que en
un flipper book antes de probarlos en una cámara de cine o video. Pone sus dibujos en secuencia,
con los números de menor a mayor en la parte inferior y "flipea" los dibujos desde la parte inferior
hacia arriba, para ver la acción.
El animador tiene que ser lo suficientemente bueno haciendo esto para aproximarse al tiempo real
de pantalla, y para detectar errores y hacer alteraciones a los dibujos. Ahora que tenemos las
cámaras de video con reproducción instantánea de los dibujos, no todo el mundo aprende a
"flipear".
Historia.





